5 "baby steps" para ayudarte a bajar de peso
Estamos empezando un nuevo mes y siento el ambiente cargado de energía linda, de ilusión por todo lo positivo que viene, y agradecimiento profundo por todo lo que ya es.
Hoy quiero recordarte que siempre estás a tiempo de retomar tus metas para vivir en salud y armonía en tu cuerpo, mente y espíritu.
Muchas veces nos enredamos más de lo necesario, recaemos en inseguridades, repetimos viejos patrones, y nosotras solitas saboteamos el camino hacia nuestros deseos.
Recuerda que el camino hacia TUS deseos sólo se puede recorrer con pequeñas acciones que realices de manera consistente.
Haz una pausa y pregunta:
Cuál es el primer paso que sabes que debes dar para activar ese deseo de tu alma? Cuál es la siguiente acción para poner ese sueño en movimiento? Qué puedes hacer esta noche? Qué puedes empezar a hacer mañana?
La clave del éxito está en esos “baby steps” que decidas hacer parte de tu rutina diaria. Por ejemplo, hoy te comparto 5 tips para ayudarte a bajar de peso, y todos son “baby steps” que puedes poner en práctica desde hoy!
1. DESAYUNA
Al comer un buen desayuno, le vas a dar a tu metabolismo un impulso y estarás en un mejor control de tus antojos. Cuando perdemos nuestro primer combustible del día, a media mañana tenemos hambre y somos más propensos a picar, merendar y comer de más sin sentido y sobre compensarnos por las calorías “ahorradas” al saltarnos el desayuno.
Los estudios demuestran reiteradamente que desayunar diariamente está asociado con el mantenimiento de un peso saludable.3 Pero si no estás listo para tomar un desayuno temprano en la mañana, escucha a tu cuerpo y come cuando sientas que es mejor para ti.
2. DORMIR UN POCO MÁS
Investigaciones sugieren que las personas que duermen cinco horas o menos pesan cinco libras más que quienes pueden dormir, por lo menos, siete horas. Con el tiempo, el aumento de peso se incrementa más rápidamente en aquellos que tienen cinco horas de sueño en comparación con los que tienen siete horas. La falta de sueño altera los ritmos circadianos y puede conducir a una regulación ineficaz del cuerpo en cuanto al balance de energía, el metabolismo y el apetito.
Los niveles anormales de leptina y grelina, las hormonas que le indican a tu cuerpo “Estoy lleno, deja de comer”, pueden comportarse de manera distorsionada con la falta de sueño. En palabras sencillas: ¡duerme más, come y pesa menos! Esfuérzate por lograr entre siete y ocho horas de sueño cada noche.
3. COME CARBOHIDRATOS, PERO VERDADEROS CARBOHIDRATOS!
Reemplaza los carbohidratos refinados como el pan blanco, pasta, pan, cereales y galletas por hidratos de carbono complejos provenientes de frutas, verduras, granos enteros, nueces, semillas y legumbres. Las frutas y verduras son ricas en fibra, lo que retarda la digestión y promueve niveles estables de azúcar en la sangre. También están llenos de antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación en el cuerpo.
Los carbohidratos provenientes de granos enteros siempre deben ser elegidos en lugar de las variedades refinadas. Es mejor si te inclinas a comerlos en la forma en que los encontrarías en la naturaleza – los panes que son hechos a base de trigo que ha sido molido, el arroz integral que es simplemente tomado directo de la planta – completos, con fibra y fito-nutrientes ¡que es la forma en que la Madre Naturaleza pretende que sean comidos!
4. HAZ UN SEGUIMIENTO DE LO QUE COMES
Sé una detective de alimentos y revisa bien lo que decidas poner en tu cuerpo. Lee las etiquetas, y evita los ingredientes como el azúcar, las grasas transgénicas, el jarabe de maíz con alta concentración de fructosa y los largos ‘nombres químicos’ que son difíciles de pronunciar.
Los alimentos más saludables son los que se encuentran tal cual los puedes ver en la naturaleza – completos y sin procesar. ¿Cuándo fue la última vez que viste una lista de ingredientes en un tallo de brócoli o en un fresco filete de salmón?
5. TOMA AGUA
El hambre se confunde a menudo con la deshidratación. La próxima vez que te sientas con ganas de merendar, toma un vaso de agua. Incluso la deshidratación leve puede alterar el metabolismo de nuestro cuerpo, es por esto que dicen que hay que beber ocho vasos de agua al día y mantener al límite el sodio, la cafeína y el alcohol.
También hay un acuerdo en que beber agua antes de las comidas puede ayudar a promover la pérdida de peso. Los estudios demuestran que aquellos que beben dos vasos de agua antes de las comidas se sienten más llenos y comen menos.
Espero que puedas empezar a implementar al menos uno de los tips que te compartí hoy, con mucho amor propio y constancia, te prometo que podrás sentir y ver los resultados.